Regresaba de una intensa caminata de dos días por el Colca. Sí, ¡yo haciendo treking! Fue una hazaña tan intensa que mis piernas dejaron de funcionar, pero aún me quedaba algo de vida cuando pasamos en autobús por alguna pampa arequipeña.
De pronto, el bus paró. Estábamos como a cuatro mil metros sobre el nivel del mar y el chofer quería enseñarnos el paisaje. Yo, con dolor de cabeza y nauseas, tomé fotos y luego me sumergí en mi asiento con la esperanza de cerrar los ojos y aparecer en mi cama. Eso último no sucedió.
___
Ficha Técnica de la foto en el microcuento:
Canon, PowerShot SX530 HS.
Arequipa, Perú. 2018.
Comments